El Papa en la catequesis de hoy manifestó que la evangelización “es más que una simple transmisión doctrinal y moral”, es el testimonio vivo "del encuentro personal con Jesucristo".
La importancia del testimonio cristiano en la evangelización del mundo contemporáneo fue lo que puso de relieve Francisco en la audiencia general de hoy en la plaza San Padre, donde ante una multitud destacó la relevancia de la exhortación apostólica Evangelii nuntiandi de san Pablo VI.
Para el Papa, la evangelización es "más que una simple transmisión doctrinal y moral". El testimonio es indispensable para ello, especialmente del encuentro personal con Jesucristo, Verbo Encarnado en el que se cumplió la salvación. Es decir, el testimonio debe ser el primer medio de la evangelización y su condición esencial para su eficacia.
El Santo Padre subrayó que el testimonio comprende también la fe profesada, la adhesión convencida y manifiesta a Dios Padre e Hijo y Espíritu Santo. Una fe que nos transforma y que transforma nuestras relaciones, los criterios y los valores que determinan nuestras elecciones.
COHERENCIA
El Pontífice advirtió que el testimonio no puede prescindir de la coherencia entre lo que se cree y lo que se vive. "Muchos cristianos solamente dicen que creen, pero viven de otra cosa, como si no lo fueran. Y esto es hipocresía. Lo contrario del testimonio es la hipocresía", afirmó.
En este sentido, el testimonio de una vida cristiana conlleva un camino de santidad, basado en el Bautismo, que nos hace "partícipes de la divina naturaleza, y, por lo mismo, realmente santos". Una santidad que no está reservada a pocos, que es don de Dios y requiere ser acogido y que fructifique para nosotros y para los demás. Francisco indicó que el celo por la evangelización brota de la santidad, brota del corazón que está lleno de Dios.
EVANGELIZARSE
El Papa concluyó reiterando la necesidad de que la Iglesia se evangelice a sí misma para poder evangelizar al mundo. "Si la Iglesia no se evangeliza a sí misma se queda en una pieza de museo. En cambio, lo que la actualiza constantemente es la evangelización de sí misma", aseguró.
La Iglesia debe tejer relaciones fraternas y generar espacios de encuentro, aplicando buenas prácticas de hospitalidad, acogida, reconocimiento e integración del otro.
Por último subrayó que la evangelización no se tiene que limitar a una transmisión doctrinal y moral, tiene que ser un testimonio del encuentro personal con Jesucristo. "El testimonio de Cristo, por tanto, es al mismo tiempo el primer medio de la evangelización y condición esencial para su eficacia, para que sea fructuoso el anuncio del Evangelio. Ser testigos", concluyó.
Comments