Contra natura: un médico pretende trasplantar un útero a un varón.
Ni a Ray Bradbury en su mejor novela de ciencia ficción se le habría ocurrido, en su mayor inventiva, lo que sí se le paso por la mente y lo llevará a la práctica el médico indio Naredra Kaushik: trasplantar un útero a un varón para que quede embarazado.
El cirujano que dirige una clínica de reasignación de género en Nueva Delhi (India) llevará a cabo el procedimiento contra natura de implantar un útero en un hombre que inició una transición hacia el género femenino y que ahora desea gestar un hijo para lo que además requerirá el uso de la fecundación in vitro.
MODIFICACIÓN HORMONAL
Richard Paulson, presidente de la Sociedad Estadounidense de Medicina Reproductiva, en 2017 aseguró que “no hay ninguna razón anatómica en el cuerpo del hombre que impida el trasplante uterino”.
MUJER A MUJER
El primer trasplante de útero de mujer a mujer se realizó en Arabia Saudí en el 2000 y el segundo se llevó a cabo 11 años después en Turquía.
Hasta el momento se realizaron más de 100 trasplantes con resultado positivo. Algunas de estas mujeres consiguieron gestar y dar a luz un bebé.
PROBLEMAS BIOÉTICOS
El caso actual es muy diferente de los mencionados. El útero no es un órgano aislado que pueda incluirse en un cuerpo masculino, sino que pertenece a un complejo sistema reproductor programado para la fecundación y la gestación que incluye estructuras anatómicas, fisiológicas y endocrinas de las que carece un cuerpo masculino.
Las escasas probabilidades de que una intervención así pudiera prosperar ante el elevado riesgo que conlleva, no justifica en ningún caso su ejecución.
Los postulados trans que pretenden revertir la naturaleza humana por resultar maleficentes, constituyen un atentado contra la buena praxis médica y el respeto a la dignidad humana por poner en riesgo de modo innecesario a pacientes sanos.
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