En el marco de la festividad de santa Verónica, indagamos sobre la reliquia conocida como la Santa Faz o Velo de Verónica, y su posible existencia.
Según la tradición cristiana, mientras Jesucristo cargaba su cruz camino al Monte Calvario, una mujer llamada Verónica se acercó a Él para limpiar el sudor y la sangre de su rostro con un paño. Este gesto de compasión y valor dejó, según se cree, la imagen de Cristo impresa en el lienzo, creando lo que hoy se conoce como Velo de Verónica o la Santa Faz.
El origen se remonta a las historias del rey Agbar V de Edesa y el "Mandylion", un lienzo con la imagen de Cristo. Más tarde, esta creencia evolucionaría para distinguir entre el Santo Sudario, hoy en Turín, y la Santa Faz.
El nombre "Verónica", que parece ser una latinización de "Berenice", es una contracción de "veron ikon" o "imagen verdadera", asociándose a la Santa Faz.
LAS REIVINDICACIONES DEL VELO SAGRADO
Lugares como Roma, Milán, Jaén en España y Alicante, reivindicaron la posesión de un lienzo identificado como el Velo de Verónica. Sin embargo, estos reclamos no fueron comprobados definitivamente.
Imagen pictórica retratada por "El Greco".
Es importante distinguir la reliquia de la Santa Faz del Santo Sudario de Oviedo, que es el paño que cubría la cabeza de Cristo en su sepulcro.
El 6 de enero de 1849, durante la festividad de la Epifanía, testigos aseguraron que en la basílica de San Pedro, la imagen del Santo Rostro se volvió más y más nítida en la estatua de Santa Verónica, un hecho confirmado posteriormente por León XIII en 1885.
ENTRE LA CREENCIA Y LA CIENCIA
A pesar de las variadas interpretaciones y creencias, la existencia del Velo de Verónica, con una imagen impresa de Jesucristo, aún es objeto de debate y no fue comprobada científicamente.
En la catedral basílica de la Asunción de la Virgen de Jaén, se exhibe una reliquia que se afirma es el Velo de Verónica, pero su autenticidad no fue verificada.
Sin embargo, la ciencia no desmiente la leyenda. Aunque no hay evidencia directa de la existencia del velo, tampoco hay pruebas que contradigan su existencia. Por lo tanto, la historia Verónica y su lienzo sagrado sigue siendo una parte importante de la tradición y la creencia cristiana, simbolizando la compasión y el amor hacia los demás.
Santa Verónica y el velo. Pintura de Mattia Preti que se expone en el Museo de Los Ángeles.
Mientras tanto, cada 12 de julio, la Iglesia celebra la festividad de santa Verónica, recordándola como la piadosa mujer que tuvo el valor y la compasión para acercarse a Jesús en su momento de mayor sufrimiento.
Independientemente de la existencia real del velo, su historia y mensaje de compasión y amor incondicional continúan inspirando a los cristianos en todo el mundo.
En última instancia, la existencia del Velo de Verónica puede ser un misterio que nunca se resuelva completamente. Que su historia continúe inspirándonos a vivir con misericordia, bondad y amor hacia el prójimo.
¿DÓNDE ESTÁ EL VELO DE VERÓNICA?
El Velo de Verónica, una de las reliquias más valiosas de la Cristiandad, está rodeado de misterio y leyendas. Diferentes lugares del mundo aseguran tener la preciada reliquia y, a pesar de las investigaciones y estudios, la ubicación real permanece incierta.
Roma, Italia
Estatua de santa Verónica con el lienzo que contiene la "Santa Faz", en la basílica San Pedro.
La tradición narra que Verónica llevó el velo a Roma durante el reinado del emperador Tiberio, tal como lo evidencia una inscripción en los restos de un cofre de madera en el Pantheon. Posteriormente, cuando se construyó la nueva basílica de San Pedro, el lienzo fue trasladado a una de las cuatro capillas ubicadas en los pilares que sostienen la cúpula. Esta capilla, erigida y adornada por Urbano VIII, alberga una estatua de mármol de Verónica junto con la reliquia.
Manoppello, Italia
Benedicto XVI visitó en 2006 santuario de la Santa Faz de Manoppello
Según otra leyenda, el verdadero "Santo Rostro" estaría en Manoppello, Pescara. En 1506, un peregrino entregó un panel con lo que afirmaba era el retrato de Cristo a Giacomo Antonio Leonelli. Las investigaciones modernas confirmaron que en este tejido no hay rastros de pintura o pigmentos, dejando en misterio la formación de la imagen. Lo más fascinante es que las dimensiones del rostro de Manoppello coinciden con las del rostro en la Sábana Santa de Turín, en contraposición al que se encuentra en el Vaticano.
Jaén y Alicante, España
Imagen del rostro de Cristo que se venera en la catedral de Jaén.
Por último, en España existen dos reliquias que también se proclaman como el Velo de Verónica: "La Santa Faz de Jaén" y "La Santa Faz de Alicante". Ambas ciudades sostienen la autenticidad de sus reliquias y atraen a miles de peregrinos cada año en busca de la bendición y el consuelo que la venerada imagen de Cristo ofrece.
Así, la cuestión de la ubicación del Velo de Verónica sigue siendo un enigma envuelto en misterio y fe. Sea cual sea su verdadera ubicación, lo que importa es que la imagen de Cristo impresa en el Velo sigue inspirando a millones de personas en todo el mundo, recordándonos la compasión y el amor de santa Verónica.
Comments