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El Papa resiste y renueva su llamado a la paz

Foto del escritor: Canal VidaCanal Vida
Francisco paso una noche de calma en el Gemelli.
 
Papa Francisco
El Sumo Pontífice al cierre de esta nota se encontraba estable.

El Vaticano confirmó esta mañana que Francisco pasó una noche tranquila y continúa descansando en el Policlínico Gemelli. “El estado clínico del Pontífice se mantiene estable”, informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Desde temprano el Papa recibió la visita del cardenal Pietro Parolin y el arzobispo Edgar Peña Parra, quienes lo acompañaron en un momento de fraternidad.


“Me siento sostenido por todo el Pueblo de Dios.” (Papa Francisco)

A pesar de haber enfrentado una crisis respiratoria días atrás, el Pontífice sigue mostrando señales de recuperación. Según el parte médico, logró alternar la ventilación mecánica no invasiva con oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo un buen intercambio gaseoso. “Está despierto, orientado y colabora activamente con las terapias”, indicaron los médicos.

 
Pedro Kriskovich
 
Un Ángelus desde el hospital: oración y esperanza

Aunque permanece internado, el Papa no quiso dejar pasar el rezo del Ángelus, enviando un mensaje cargado de fe y preocupación por la paz mundial. “Desde aquí, la guerra parece aún más absurda”, escribió en su reflexión dominical, mencionando los conflictos en Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Myanmar, Sudán y Kivu.


El Obispo de Roma agradeció las oraciones y el apoyo de millones de fieles: “Me siento sostenido por todo el Pueblo de Dios”. Asimismo, destacó que la enfermedad le permitió experimentar en cuerpo y alma la fragilidad humana, y cómo la confianza en Dios se fortalece en estos momentos.

 
GIN
 
Reflexión: el juicio y las palabras

En su mensaje, el Pontífice recordó la importancia de mirar con caridad a los demás y de cuidar nuestras palabras. “Los malos frutos son las palabras violentas, falsas y vulgares; los buenos son las palabras justas y honestas que dan sabor a nuestros diálogos”, expresó.


Finalmente, invitó a los fieles a reflexionar: “¿Cómo miro a los demás? ¿Mis palabras transmiten amargura o esperanza?”.


Mientras el mundo ora por su recuperación, Francisco sigue firme en su misión: ser un faro de fe y amor en medio de la tormenta.

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