El Papa no sufrió: el estremecedor testimonio de su médico personal
- Canal Vida
- 24 abr
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Actualizado: 24 abr
“Tenía los ojos abiertos… pero no respondía”. El testimonio del médico personal del Papa Francisco conmueve al mundo. Murió en coma, sin dolor, sin saber que partía. Fue su último gesto: una entrega total, silenciosa… y profundamente cristiana.
"No se dio cuenta de lo que estaba pasando". Esa frase, simple y brutal, la pronunció el Sergio Alfieri, médico personal del Papa Francisco, y uno de los primeros en ingresar al apartamento de la Casa Santa Marta la mañana del 21 de abril. Fue él quien confirmó lo que muchos temían y a la vez necesitaban escuchar: Francisco no sufrió en su hora final.
Eran las 7.35 cuando el corazón del Pontífice del pueblo se detuvo. El mismo médico que lo había operado, atendido y acompañado durante años, fue quien lo encontró aún con los ojos abiertos, conectado a oxígeno y con vía intravenosa. “Estaba vivo, pero en coma. No respondía”, relató Alfieri al canal TG1. Su voz, cargada de emoción, dejó entrever la humanidad del momento. “Pudo haber sido una embolia o un derrame, pero con certeza digo esto: el Santo Padre no sintió dolor”, señaló.
El parte médico oficial, firmado esa noche por el jefe de salud del Vaticano, Andrea Arcangeli, confirmó la causa de muerte: derrame cerebral seguido de coma y colapso cardiocirculatorio irreversible. Todo en un cuerpo debilitado por neumonía bilateral, hipertensión y diabetes.
Francisco, que tantas veces se acercó al sufrimiento ajeno, fue sostenido por el silencio y la paz en su último suspiro. No hubo agonía, no hubo gritos, no hubo soledad. Solo la calma de un final que parecía preparado desde la fe.
El Papa del abrazo se fue en silencio, como vivió: sin miedo, sin quejas, sin ruido.
Y ahora, el mundo llora su ausencia… pero encuentra consuelo en saber que Dios lo llamó sin dolor.
La muerte nos llamará a todos tarde o temprano, pensemos siempre en estar preparados y no dejar para último la comunión con Cristo.
El Papa tuvo la bendición de una muerte que todos desearíamos tener despedirse de todos y esperando el brazo de los ángeles llevándolo al encuentro con Dios en paz, sin dolor feliz 🙏.